USDTRY largo
La contundente subida de 200 puntos básicos en los tipos de interés aprobada la semana pasada en Turquía no impide que hoy su cotización se hunda a nuevos mínimos históricos. A la crisis latente en el país se suma ahora la creciente tensión geopolítica en la zona por el conflicto entre Armenia y Azerbaiyán.
Desde el fin de semana los choques entre fuerzas de Armenia y Azerbaiyán han provocado decenas de fallecidos, y en la zona alertan de que el conflicto está al borde de desatar una guerra entre los dos países. El Gobierno armenio, de hecho, ya ha declarado el estado de guerra en el país.
El posicionamiento rotundo de Turquía a favor de Azerbaiyán y en contra de Armenia y la movilización de la diplomacia de Rusia en el conflicto amenazan con disparar la tensión geopolítica en la zona, agravando los efectos de la crisis económica latente. El coronavirus ha hecho especial mella en una de las principales fuentes de ingresos de Turquía, el turismo.
Las amenazas geopolíticas aumentan el desplome de la lira turca, que pierde todo lo ganado la semana pasada a raíz de la subida de 200 puntos básicos de los tipos de interés anunciada por el banco central de Turquía. El pasado jueves, en un intento por frenar el descalabro de su divisa, subió los tipos de interés desde el 8,25% hasta el 10,25%.
La contundencia en la subida de tipos del banco central de Turquía revalorizó hasta un 2,5% la cotización de la lira turca en su cruce con el dólar. Pero menos de una semana después, la divisa turca pierde todo lo ganado y registra nuevos mínimos históricos al caer hasta las 7,85 unidades por dólar.
La lira turca, que ha perdido la mitad de su valor desde 2018 en paralelo al desplome de las reservas de divisas del país, también cotiza en mínimos históricos en su cruce con el euro. Con las caídas de hoy son necesarias 9,18 liras para obtener un euro. Al cierre de 2019 esta cifra se limitaba a 6,67 unidades.
La evolución de la lira turca adquiere especial relevancia en el Ibex en el caso de BBVA, que tiene una participación del 50% en Garanti Bank, el tercer banco del país. Turquía es el tercer mercado por volumen para BBVA al aportar el 21% del beneficio.
Desde el fin de semana los choques entre fuerzas de Armenia y Azerbaiyán han provocado decenas de fallecidos, y en la zona alertan de que el conflicto está al borde de desatar una guerra entre los dos países. El Gobierno armenio, de hecho, ya ha declarado el estado de guerra en el país.
El posicionamiento rotundo de Turquía a favor de Azerbaiyán y en contra de Armenia y la movilización de la diplomacia de Rusia en el conflicto amenazan con disparar la tensión geopolítica en la zona, agravando los efectos de la crisis económica latente. El coronavirus ha hecho especial mella en una de las principales fuentes de ingresos de Turquía, el turismo.
Las amenazas geopolíticas aumentan el desplome de la lira turca, que pierde todo lo ganado la semana pasada a raíz de la subida de 200 puntos básicos de los tipos de interés anunciada por el banco central de Turquía. El pasado jueves, en un intento por frenar el descalabro de su divisa, subió los tipos de interés desde el 8,25% hasta el 10,25%.
La contundencia en la subida de tipos del banco central de Turquía revalorizó hasta un 2,5% la cotización de la lira turca en su cruce con el dólar. Pero menos de una semana después, la divisa turca pierde todo lo ganado y registra nuevos mínimos históricos al caer hasta las 7,85 unidades por dólar.
La lira turca, que ha perdido la mitad de su valor desde 2018 en paralelo al desplome de las reservas de divisas del país, también cotiza en mínimos históricos en su cruce con el euro. Con las caídas de hoy son necesarias 9,18 liras para obtener un euro. Al cierre de 2019 esta cifra se limitaba a 6,67 unidades.
La evolución de la lira turca adquiere especial relevancia en el Ibex en el caso de BBVA, que tiene una participación del 50% en Garanti Bank, el tercer banco del país. Turquía es el tercer mercado por volumen para BBVA al aportar el 21% del beneficio.
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